miércoles, 27 de noviembre de 2019

PROGRAMA DE RADIO (27-11-2019)

Hablamos de la libertad con el Doctor en Filosofìa de la UBA Juan Pablo Vàzquez, con el militante de Nuevo Encuentro en Avellaneda Miguel Martìnez y compartimos un informe de France 24 sobre la situaciòn social en Colombia.

sábado, 16 de noviembre de 2019

ENTREVISTA DE BBC MUNDO A EVO MORALES:


LA CLASE MEDIA ARGENTINA CASTIGADA POR EL GOBIERNO DE MACRI:

Datos oficiales

Por la crisis, la clase media ya es menos de la mitad de la población porteña

Se redujo del 52,8% al 46,4% en cuatro años. En el mismo período, la pobreza aumentó del 16,4 al 22,1%.

En la Ciudad de Buenos Aires, los hogares Los “vulnerables” aumentaron del 9,2 al 12,2% y la clase media frágil, del 9,8 al 10,3%. Foto Maxi Failla
En los últimos años, de la mano de los ajustes y la recesión, la extendida clase media porteña vino descendiendo sin pausa varios escalones, engrosando la legión de los sectores frágiles, vulnerables o directamente pobres e indigentes.
Según datos de la Dirección de Estadística y Censos de la Ciudad de Buenos Aires del segundo trimestre, en los últimos cuatro años, la clase media tuvo un fuerte achique: bajó del 52,8% al 46,4% de los 3.064.000 que conforman la población de la Ciudad. Si se agregan los sectores más altos, el descenso es más pronunciado: del 64,6 al 55,5% de la población. De 1.967.000 personas en el segundo trimestre de 2015, sumaron 1.700.000 en igual período de 2019: un retroceso de 267.000 personas. 
Tomando en cuenta el leve crecimiento poblacional, el grueso pasó a engrosar el número de pobres, de no pobres en “situación vulnerable” y clase media frágil, así definida porque “ante una eventual disminución del poder adquisitivo de los ingresos familiares, por ejemplo, por la suba de precios por encima de sus ingresos, o ante la pérdida del empleo o de ingreso de alguno de sus miembros, tienen una probabilidad alta de caer en los estratos más bajos”.
Los pobres aumentaron en 178.000 personas (de 501.000 a 679.000), los “vulnerables” aumentaron de 281.000 a 374.000 (+ 93.000) y el sector medio frágil pasó de 299.000 a 315.000 (+16.000).
Para definir esos estratos de población, si bien no se toman en cuenta atributos que habitualmente se consideran constitutivos de la clase media- como el nivel educativo y el patrimonio- la estadística oficial utiliza el ingreso per cápita del hogar en relación a las canastas de consumo, que también se utiliza para medir la indigencia y la pobreza.
Así, por ejemplo, clase media –propietaria de su vivienda, con bajas expensas- son los hogares que pueden solventar entre 1,25 y 4 veces la canasta de consumo de la Ciudad valuada para una familia tipo, en septiembre pasado, en $ 43.471. O sea, consumos entre $ 54.338 y 173.884 pesos.
De este modo, se compara el ingreso per cápita de los hogares con líneas ajustadas al perfil sociodemográfico de las personas y familias y a los consumos propios de los habitantes de la Ciudad, según la metodología oficial.
De esta manera, la ancha base de la pirámide social, compuesta de clase media, se fue comprimiendo y los que se “cayeron” pasaron a agrandar los sectores precarios, frágiles, vulnerables, pobres e indigentes. Números que marcan una fuerte reversión de la otrora movilidad social ascendente, medida en términos de ingresos y de consumo.
En relación al inicio de la serie en 2015, y comparando trimestres homogéneos, el porcentaje de pobres en 4 años subió del 16,4 al 22,1% en el segundo trimestre de 2019. Es el nivel más alto de indigentes y pobres de todo el período. Los “vulnerables” aumentaron del 9,2 al 12,2% y la clase media frágil aumentó del 9,8 al 10,3%.